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Era Jueves por la tarde parecía que la semana ya dormía en esa pequeña siesta antes de finalizar su jornada, la tarde era muy fresca y hermosa como para quedarse en casa, ella se levanto de su computadora y se acerco a la ventana, el aire fresco le agitaba el cabello y parecía que con sus dedos invisibles trataba de acariciarlo, respiro profundamente sintiendo aquella vitalidad que solo las tardes de verano podrían ofrecerle, se fue hacia el tocador se arreglo un poco y coloco una diadema en su cabello para que el viento impertinente no lo hiciera volar.

Después de 15 min ya estaba caminando en la calle mientras disfrutaba de esa mágica tarde, bajo su brazo un libro de color negro y con grandes letras doradas, caminaba hacia el parque cercano a su casa, el lugar estaba lleno de niños y de personas que habían sentido aquella magia de la tarde y tuvieron la misma idea, se alejo de todo el ruido lo mas que pudo y encontró un hermoso árbol en un claro bajo aquella perfecta luz, el mas hermoso lugar para leer y relajarse, la vista era perfecta y solo el viento y los arboles la acompañaban, mientras leía y se dejaba guiar por las letras, escucho un ruido, un balón había aterrizado no muy lejos de donde ella estaba, miro al rededor y observo a un joven corriendo hacia ella....

- Te he lastimado con el balón?
- No solo ha caído por ahí
- Ah que bien me preocupe que pudiera lastimar a una chica tan guapa
- *sonrojada* no... no me golpeo *tratando de leer su libro*
- Digital.
- Que has dicho?
- Digital, el libro que tienes en tus manos, así dice la portada
- Ahhh, si pues lo he comenzado a leer y me ha gustado mucho
- Yo no soy tan bueno en la lectura, pero me gusta que me cuenten historias
- Tu novia debe ser una chica afortunada *tono sarcástico*
- No tengo novia *se acerca a ella*

En ese momento una voz le gritaba...

- VAMOS NO TENEMOS TODA LA TARDE HAY QUE TERMINAR EL PARTIDO!!!!!!!!!!
- Parece que te hablan
- Si mis amigos siempre de oportunos..... vienes todos los días a leer
- a veces, no siempre
- Pues espero verte seguido *se aleja un poco sin dejar de verla*
- mmm no lo creo pues mis estudios...
- Bueno pero espero verte *se gira y tropieza cayendo sobre la grama y soltando el balón*
- jajajaja *tratando de ocultar la risa*
- *Se incorpora de un salto tratando de disimular y se ríe* jajajaja por lo menos te saque una sonrisa *muy sonrojado*, me voy Adiós
- *levantando la mano se despide*

Después de esos minutos lo único que quería era volver a leer el libro, pero por mas que trataba de concentrarse, su mente la hacia pensar en el joven que acababa de conocer, se dijo a si misma que eso no podía ser, que era solo la magia de la tarde, después de una horas, se levanto y se fue a su casa, mientras caminaba un hoja paso junto a ella, la tarde terminaba con el suave susurro del atardecer, la noche se daba paso ante esas calles, al llegar a casa la tarde se cubría con ese color dorado, entro por la puerta no sin antes volver hacia atrás, para mirar los últimos rayos de sol de ese mágico día, entro a su casa y cerro la puerta con cierta nostalgia, como sintiendo ganas de alargar ese día, la sala vacía la saludaba como siempre, recorrió la puerta y llego a la cocina, se preparo algo de cenar, el libro que cargaba ahora reposaba sobre una mesa en medio de la sala, después de comer, camino hacia su habitación y aunque no había nadie mas, el ritual era el mismo, ese caminar, seduciendo a las paredes con sus caderas, mientras dejaba ver su desnudez ante ellas, quito primero su blusa blanca dejando al descubierto un sostén del mismo color, desabotono el pantalón despacio y lo bajo suavemente por sus piernas, su cabello castaño largo le llegaba un poco mas abajo e los hombros, tomo una toalla y acomodando su ropa sobre la silla con el cuidado minucioso de dejarla tal cual era su costumbre, se dispuso a tomar una ducha.
El agua caía despacio sobre su cuerpo y lo recorría poco a poco, sus pensamientos se revoloteaban con el calor de la ducha, sus manos recorrían su cabello y pensaba en los ojos de ese chico...

- Que es lo que me pasa - pensaba - Acaso es que tanto me hace falta tener a alguien a mi lado...

Después de la ducha se sentía mucho mejor y ya no pensaba tanto, la noche arropo sus sueños y velo sus ideas, durmió muy bien. La mañana la despertó con el cálido beso de los rayos del sol, se sentía de maravilla y se ducho alistandose para salir a estudiar, desde hacia un año vivía sola, por la universidad y sus padres le enviaban el cheque para sus gastos, le gustaba lo que hacia y siempre tenia en mente las palabras de su padre, primero el estudio después el amor, y así lo había hecho desde que llego, la universidad estaba llena de jóvenes como ella, que buscaban un futuro mejor y por su hermosura, tenia muchos admiradores, los cuales no tenían oportunidad contra su estudio, las clases eran siempre de interés, aun los profesores conocían su pasión por sus estudios, lo q no sabían era que ella quería otra carrera, pero su padre siempre quiso que siguiera sus pasos y por el amor q le tenia acepto, el semestre estaba apunto de terminar, los exámenes finales estaban casi sobre ella, habían muchas caras de preocupación, ella estaba igual preocupada por los exámenes, quería tener el mejor promedio posible, esa tarde al salir, no fue a su casa como siempre, se fue al mismo parque bajo ese árbol a estudiar, paso toda la tarde tranquila estudiando, el incidente del día anterior parecía haber sido borrado de su memoria, llego a su casa y como siempre después de la ducha durmió tranquilamente, el día siguiente el examen estuvo mas sencillo de lo que esperaba, salió rápido y se fue directo a su casa, mientras estaba en el sofá leyendo, sintió una leve brisa rozar su mejilla y revolotear unos cabellos, se levanto y miro por la ventana, esa magia de aquella tarde era la misma, se puso una blusa mas cómoda y llego al estante donde estaba el libro que una no terminaba, camino hacia el parque, era extraño mientras mas se acercaba aquel lugar mas latía su corazón parecía, que algo la llamaba, llego aquel lugar bajo ese árbol, se sentó y sin abrir el libro miro a todos lados, sentía como si faltara algo, respiro profundamente y se dispuso a leer cuando una voz la hizo volver su mirada.

- Sabes creí que no volverías
- volviendo la mirada muy rápido- Hola...
- Hola, perdón si te asuste...... o interrumpí tu lectura?
- No, no lo que paso es que me sorprendiste
- Me alegra saber que me recuerdas
- Por que debería olvidarte?
- Pues no lo se, una chica tan linda debe tener muchos admiradores
- ....... Y hoy no estas jugando con tus amigos?
- jajaja pues no este día he venido a relajarme un rato
- Pues me alegro por ti
- y veo que eres buena eludiendo
- ahh? por q lo dices
- Pues as esquivado muy bien lo de tus admiradores
- con las mejillas sonrojadas un poco- no es eso.... es que no tengo admiradores
- una chica tan guapa como tu y sin novio?
- prefiero dedicarme a mis estudios ya luego tendré el tiempo para los novios
- Sentandose junto a ella- pues eso esta muy mal, -tomando una ramita la lanza- recuerda matate estudiando y serás un cadáver culto, siempre he creído en que todo debe ser moderado
- lo mira seriamente - pues no se que es lo que creas pero yo me esfuerzo por ser la mejor
- no me mal entiendas, solo quería decirte que para todo hay tiempo
- pues no para todo ademas ......